En un post anterior, hablamos de los accidentes más comunes que ocurren en la montaña, hoy vamos a hablar de la hipotermia.
¿Qué es la hipotermia?
La hipotermia ocurre cuando la temperatura central del cuerpo disminuye por debajo de los 35°C debido a la exposición prolongada a bajas temperaturas o la inmersión en agua fría. La hipotermia puede ser peligrosa y potencialmente mortal si no se trata. Los síntomas de la hipotermia pueden variar según la gravedad de la afección, pero pueden incluir:
- Temblores incontrolables: Los temblores son una respuesta natural del cuerpo para generar calor y mantener la temperatura corporal. Los temblores incontrolables son un síntoma común.
- Confusión o desorientación: La hipotermia nos puede afectar el cerebro y causar confusión, desorientación, dificultad para hablar o pensar claramente.
- Fatiga y letargo: La hipotermia hace que nos sintamos cansados y letárgicos, y es posible que tenga dificultad para moverse o hablar.
- Piel fría y pálida: La hipotermia puede hacer que la piel se sienta fría y seca al tacto. La piel también puede ponerse pálida o azulada.
- Problemas respiratorios: La hipotermia puede afectar la respiración y hacer que la respiración sea superficial o lenta.
Si sospechas que alguien tiene hipotermia, es importante actuar rápidamente para evitar complicaciones graves. Si la hipotermia es leve, puedes ayudar a la persona a calentarse y darle bebidas calientes. Si la hipotermia es grave, es importante buscar atención médica inmediata.
¿Cómo recuperarse de la hipotermia?
La hipotermia es una afección potencialmente mortal y es importante buscar atención médica de emergencia si sospechas que alguien está sufriendo de hipotermia. Si la hipotermia es leve, es posible que la persona pueda recuperarse por sí sola con los siguientes pasos:
- Retirar la ropa húmeda y mojada y reemplazarla con ropa seca y abrigada.
- Envolver a la persona en mantas o sacos de dormir para mantenerla caliente.
- Proporcionar bebidas calientes y alimentos ricos en carbohidratos para aumentar la energía del cuerpo.
- Si es posible, mover a la persona a un lugar cálido y protegido del viento y la lluvia.
- Realizar movimientos suaves y lentos para ayudar a estimular la circulación sanguínea.
Es importante recordar que la hipotermia es una afección grave y si la persona afectada no mejora después de los primeros auxilios, es necesario buscar atención médica de emergencia de inmediato. En casos graves de hipotermia, es posible que se necesiten tratamientos como la reanimación cardiopulmonar (RCP) o el calentamiento intravenoso para ayudar a la persona a recuperarse.
Foto de portada: Imagen de Nancy Morris en Pixabay